EL ABSTENCIONISMO

DE PROVINCIA 

Por: 

Carlos José Bolaños

“ES, A LA VEZ, DEBER Y PRIVILEGIO DE UN CIUDADANO NORTEAMERICANO INTERESARSE POR LA POLÍTICA Y, CONSIGUIENTEMENTE, EJERCITAR SU DERECHO A AYUDAR A QUE SE SITÚEN, MEDIANTE SU VOTO, HOMBRES Y MUJERES DIGNOS EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA.

EL PARTIDO POLÍTICO AL QUE PERTENEZCA UN HOMBRE ES DE MUCHO MENOS IMPORTANCIA QUE LA CUESTIÓN A EJERCITAR EL VOTO. SI LA POLÍTICA SE MANCHA CON ACTUACIONES DESHONESTAS, NO HAY QUE CENSURAR A NADIE SINO AL PUEBLO QUE TIENE CONSIGO LA FACULTAD PARA MANTENER LEJOS DEL PODER A GENTE DESHONESTA, INDIGNA E INEFICAZ…”  Napoleón Hill.

Se dice que la peor de las  fallas de cualquier pueblo es carecer de una buena formación política.  Durante muchos años se nos dijo que  la política era ser liberal o conservador. La misión de los dirigentes era  despertar sentimientos primarios, encender los ánimos, y dejar al pueblo trenzado  en discusiones que llegaron a terminar en enemistades irreconocibles o en el cementerio.

Entre el 60 y 70% de la población  no vota como protesta pero nunca se le  ha informado  que no tiene ningún efecto,  igual que el  voto el  nulo; a quienes le sirve es a los politiqueros  y asumen que quienes no votan están de acuerdo con las cosas que han hecho y los autorizan para hacer cosas peores.

Jamás podemos pretender eliminar la rama legislativa. Reconocemos que hay una minoría de  buenos congresistas que a pesar de la disciplina de bancadas, unidades nacionales, tenazas, aplanadoras, etc., no   sucumben ante las  propuestas burocráticas tentadoras para aprobar proyectos inconvenientes `para el desarrollo integral del país.

En esta campaña hay propuestas interesantes: todo departamento debe tener  su senador, especialmente San Andrés para defender lo poco que queda; bajar el precio de la gasolina, mejorar la calidad de la educación,   renegociar los TLC., las concesiones minero energéticas y de infraestructura. Protección del ambiente y  social de la mujer. Pagarles a los parlamentarios y diputados  por  sesiones, eliminar la reelección, prohibición a las EPS de contribuir a las campañas electorales, etc. 

Los abstencionistas tienen en sus manos el poder para hacer la revolución pacífica, utilizando  el voto el banco (Art.258 CP): podrán cambiar la clase política, en solo 8 horas.

E-mail: carlosjosebol@hotmail.com