Se le acaban a uno los adjetivos para calificar lo que en nuestra opinión ha sido otro show de los mismos a los que nos tiene acostumbrados el régimen que se resiste a fenecer y a entregar al poder a quienes siendo aliados han dado señales de cambios que añoramos los colombianos de bien. Que show mediático montado desde la casa de nari con las rabietas de pachito y del ilustre asesor presidencial primo de Pablo Escobar con últimos nombramientos en las carteras ministeriales. El “bueno” del vicepresidente, el mismo que en palabras del propio presidente le lagarteó el cargo hasta que lo convenció y que además es la hora que todavía no ha aclarado las relaciones con el famoso Mancuso sale a vituperar y a cuestionar al nuevo ministro Vargas Leras y a la Corte Suprema de Justicia, sosteniendo que las incontables crisis que se han venido presentando son culpa de los demás y no propias del nefasto régimen que desfachatez al utilizar términos que solo se estilan en el bajo mundo como “traidor”, cabe preguntarnos cuál será la objetividad, imparcialidad y equilibrio que le acompañarán en su nueva misión como director de noticias de una cadena nacional que afortunadamente Yo por lo menos no sintonizo. Y que tal don Obdulio amenazando con la “moción de censura” a ministros no posesionados, se le olvidaron muy rápido el origen de las chuzadas y los falsos positivos.
Qué decir del hermano del ex Fiscal Seccional de Antioquia detenido por sus presuntos vínculos con sectores oscuros de la sociedad acción que se dio gracias al mismo ente investigador, presentando al Congreso de la República proyecto de acto legislativo para dejar la potestad de nombramiento del Fiscal General de la Nación en cabeza del ejecutivo. No nos deberíamos sorprender de estas acciones de un gobierno que estableció nuevos códigos de moral y ética que tan mal ejemplo han causado en el país y que tan mala imagen nos han generado en el ámbito internacional. Como es posible que un gobierno tan cuestionado por sus inmensos escándalos de corrupción y abuso a los derechos humanos quiera cerrar su “brillante” periplo con broche de oro típico de sus principios. Un Fiscal nombrado a dedo no tendría independencia ni objetividad para adelantar de manera adecuada investigaciones que puedan afectar al propio gobierno y a quienes lo rodean, imaginémonos si eso fuera realidad Hoy como habrían sido las investigaciones sobre los escándalos del DAS, la yidisteodolindopolítica, los falsos positivos, el de Agro Ingreso Seguro y otros que se me olvidan. Sería tanto como permitir “Yo te nombro, tú me investigas y me absuelves”. Guardadas las proporciones sería repetir lo que sucede con las investigaciones y resultados que nos ha brindado la mal denominada Comisión de acusaciones de la Cámara de Representantes que más bien debería llamarse del perdón y olvido. A mi modo de ver todos estos shows sumado a lo del inoportuno “conflicto” con Venezuela no son sino cortinas de humo para enrarecer el ambiente y desviar la atención de la opinión pública sobre las varias investigaciones penales en contra de los altos funcionarios del Gobierno por todo lo que ha sucedido. La Fiscalía General debe ser un ente totalmente autónomo al ejecutivo y a la Justicia al estilo de la Procuraduría y la Registraduría.
Finalmente debemos celebrar con esperanza que en los anuncios del nuevo gobierno para incluir en su agenda se mantengan como prioritarios los temas que ha defendido el liberalismo como la Ley del primer empleo y las reformas sociales que tanto se requieren. También pinta interesante que la nueva ministra de educación reconozca que lo prioritario debe ser llevar calidad al modelo y no solamente ampliar cobertura.