Y estamos a 3 semanas de elecciones territoriales para elegir Alcalde, concejales y ediles. Una nueva oportunidad para manifestarnos si hemos aprendido delas duras lecciones que nos ha dejado el inmediato pasado, a ver si somos capaces de ejercer nuestro deber democrático y renovar nuestra cuestionada clase dirigente, vamos a observar si la politiquería de la lechona, la cerveza, el tamal, los maletines de oscuros dineros provenientes de la corrupción y la delincuencia van a seguir imperando en las elecciones y eligiendo malos gobernantes o si por fin somos capaces de pegar un nuevo grito de independencia y alejarnos de los carruseles de la contratación, de las chuzadas, de los agro ingresos robos seguros, de los falsos positivos, de las losas de Transmilenio, de sacar por la puerta de atrás a los corruptos, a los incapaces, a quienes se pueden reproducir solo a costillas de la politiquería y de la falta de conciencia y cultura política que abunda en esta sociedad que responde sólo a la inmediatez de lucrarse o alimentarse por un día o por dos meses dejan la oportunidad de garantizar un desarrollo sostenible para el conjunto de la sociedad.
Estas elecciones son una oportunidad para ver si hemos madurado y al fin votamos en conciencia y no por el estómago, si entendemos que es de nosotros que depende que no se repitan los escándalos de corrupción de estos años tanto en el nivel distrital como en el nacional, si cortamos el paso para que los presupuestos dejen de atraer a los carteles de contratistas y a los señores de la narcoterrorismo (llámense guerrilla o bacrim) así como la inoperancia de algunos dirigentes elegidos pero absolutamente incapaces de saber cuál es el camino de la administración pública, si lo hacemos habremos avanzado
Mientras haya gente armada, botaplata, suministrando alcohol y colesterol a diestra y siniestra intimidando y aprovechándose de la comunidad, corrompiendo la conciencia de la gente, imponiendo en el mar de la ignorancia, con sus pobres argumentos, pero muy efectivos, candidatos que les han vendido el alma, comprando o aprovechándose por los votos, es lamentable tener que vaticinar que seguiremos padeciendo el espectáculo elegir clase dirigente que únicamente van a satisfacer propios u oscuros intereses no habrá futuro. Los bogotanos, y en especial los fontibonenses tenemos que derrotar el atraso y la ignorancia. Votar en conciencia, con responsabilidad democrática y de futuro, cuando estemos frente al tarjetón, enfrentados contra nuestras propias convicciones, contra nuestra conciencia. ES POSIBLE, lo podemos hacer, Votemos por los mejores, los más preparados, los más experimentados. Por quienes den garantía que no tienen vínculo con contratistas ni con dineros de dudosa origen, ni con personas señaladas con vínculos con la ilegalidad. Tampoco podemos dejarnos llevar en el mar de la confusión que generan las encuestas que en lugar de dar una idea sobre las tendencias y medir la opinión se están convirtiendo en un escabroso instrumento para formar opinión. Pretenden aprovechar del problema cultural de la despreocupación de lo público de la mayoría de la ciudadanía de una parte y golpear al subconsciente colectivo de “irse con el ganador” y ponen en la cima de las supuestas preferencias no necesariamente a los mejores candidatos.
No cambie su voto por baratijas porque aquellos que llegan a los cargos de elección comprando conciencias no harán cosa diferente a satisfacer sus propios intereses o lo de aliados oscuros pero jamás los intereses de las comunidades que los eligieron y que necesitan de una efectiva y urgente intervención del Estado en la solución de su agobiante problemática. Vote por el CAMBIO.
.
Entradas
