22 de agosto de 2013

Hasta 4 años de cárcel por transportar carne de tortuga icotea

ESQUINA AMBIENTAL 


Janer de Jesús Sarmiento fue sentenciado en primera instancia a pagar 4,6 años de cárcel (56 meses) y 51´581.250 pesos (87,5 salarios mínimos mensuales legales vigentes), por transportar 2,9 kilogramos de carne y restos corporales de carne de tortuga Icotea. Así lo decidió el Juez Treinta Penal del Circuito de Bogotá, quien lo halló culpable del delito de ilícito aprovechamiento de los recursos naturales renovables, con el agravante de recaer sobre una especie amenazada como la Icotea. Este proceso inició en abril de 2012, cuando Sarmiento intentó ingresar a Bogotá una nevera con los 2,9 kilogramos de tortuga. 

Sin embargo, la Policía Nacional y la SDA lo detuvieron en la Terminal de Transportes del Salitre, decomisaron la mercancía y pusieron en caso en manos de la justicia. Durante las audiencias preliminares, Sarmiento aceptó la totalidad de los cargos que le fueron imputados. Según la SDA 2,9 kilogramos representan la muerte de aproximadamente 150 tortugas, las cuales son torturadas por los traficantes de fauna silvestre para extraer la poca carne de su cuerpo. 

Los argumentos que llevaron al juez a determinar la punibilidad fueron la certeza sobre el carácter vulnerable y controlado de la especie fáunica; la evidente ausencia de un salvoconducto para justificar el transporte de los restos animales; y la realización consciente y voluntaria del transporte de la carne de tortuga. “Todos los animales silvestres merecen vivir en sus ecosistemas naturales, y no encerrados en jaulas o viviendas donde los adoptan como mascotas. El caso de las tortugas es mucho más alarmante, ya que además de extraerlas de su hábitat natural, son sometidas a crueles prácticas para extraer su carne, como meterlas vivas en ollas con agua caliente y abrir sus caparazones. Por esta razón esta condena es ejemplar y sirve de ejemplo para que no sigamos atentando contra nuestros recursos naturales”, apuntó el Secretario Distrital de Ambiente.

DIALOGO ENTRE EL PADRE Y EL HIJO

DE PROVINCIA 


Por: 

Carlos José Bolaños




El Padre preocupado por la grave situación  que vive Colombia llama al Hijo y le pregunta: Hijo cuando te envíe a la tierra, Tú  les dejaste la paz a todos, incluidos los colombianos?



Si Padre. A todos les dejé la paz, incluidos los colombianos. La prueba es que en cada Misa que celebran diariamente, repiten textualmente  lo que deje en cabeza de  los Apóstoles: “MI PAZ OS DEJO, MI PAZ OS DOY”: Además se dan el abrazo de la paz.(sinceramente, o puro formalismo?)                 



El Hijo, un poco intrigado y para salir de dudas le dice al Padre: por qué me preguntas eso?



Pues Hijo, es que los colombianos se matan entre ellos todos los días y me viven pidiendo la paz y por un momento pensé que se te había olvidado cobijarlos con tan preciado tesoro.



Padre si miras bien a los habitantes de esa, que puede llegar a ser una  gran nación, a quienes privilegiaste con tantas maravillas y por lo cual muchas naciones te reclaman, no han sabido escoger los caminos adecuados, que les permita vivir en armonía. Su independencia, de la que tanto se vanaglorian, la propiciaron provocando a un intolerante hasta formar una  reyerta. Cumplieron 203 años de guerras y de impunidad generando un altísimo grado de desigualdad y pobreza.  



Se dejan llevar, fácilmente por el tener  y no por el  SER. Algunos están cegados por el afán del enriquecimiento rápido. Llenos de odio y sed de venganza.          



Gracias Hijo, no sigas que me duele. Tus explicaciones son satisfactorias. Espero no equivocarme y en vez de que me pidan la paz, que ya les dimos,  reaccionen y digan: ACOJAMONOS a la Paz que nos dejó Jesús.



Gracias Padre por la aclaración que les haces. Ilumínalos  para que se convenzan que la manera  de  acabar con esos ríos de sangre, la impunidad, la corrupción,  la avaricia, etc., la solución  está en la imparcialidad de la  Justicia,  la Solidaridad, la Verdad, el Amor, la Tolerancia (ante lo tolerable), que deben provenir de la cúpula de los altos poderes.



E-mail: carlosjosebol@hotmail.com

  

“EL PARO”


DESDE MI REFUGIO

Por: Héctor Alfonso Delgado

Comenzó paro del agro y otros sectores con influencia económica, se habla del sector minero, agrario, transportadores especialmente los de carga pesada con el argumento que el gobierno nacional ha incumplido acuerdos hechos en el pasado, lo cierto es que se afecta la movilidad del país en sus actividades diarias, en las ciudades capitales no llegan los productos de la canasta familiar a los hogares. El otro problema es que con estas protestas justificadas, los más afectados son los campesinos porque sus productos se represan en sus lugares de origen, también los enfrentamientos que se presentan entre los manifestantes y la fuerza pública, cada uno desde su bando defendiendo sus intereses, los otros defendiendo la institucionalidad, lo cierto es que los perjudicados somos todos los colombianos, el pueblo es el más afectado como se ve con lo que presentan los medios de comunicación, radio, televisión y prensa escrita.

Lo preocupante es que el Gobierno Nacional no hace pronunciamientos contundentes, se limitan a decir que se han quedado cortos los organizadores del paro, pero no se dimensionan las consecuencias que tiene el paro, inicialmente se hablaba de dos o tres departamentos y ya vamos en siete, lo que significa que sí tiene fuerza, lo que afecta enormemente a nivel Nacional. Se observan las manifestaciones en las ciudades que realizan universitarios y sindicatos en las que respaldan y apoyan el paro.

Otros preguntarían donde está el Movimiento Comunal, de pronto no se ha notado su protagonismo, pero estoy seguro que ellos (as), participando de manera activa y se han unido a esta causa, hemos visto las injusticias que se han cometido con estas poblaciones, los precios tan elevados del combustible para todos en especial, los productores, pero lo estamos exportando, en la parte agrícola se observa la importación de productos al país, desconociendo a nuestros campesinos colombianos.

Ojala las partes lleguen a un feliz acuerdo, en beneficio a país, los cierto es que hay muchos productos represados, los perecederos. Con el agravante que se generan incrementos en el costo de la canasta familiar, algún comunal veterano (a) dirá, “la papita se encareció”, ojala la parte se sienten y analicen  la situación, que esta protesta dé sus frutos positivos a los diferentes sectores comprometidos. El movimiento comunal seguirá en pie de lucha por el bien de nuestros sectores y nuestra localidad como se ha hecho a través de la historia.   

hectoraldelgado517@gmail.com.