Alianza del Todo Vale

Decidida la candidatura de la agrupación autodenominada “verde”, que por cierto muy poco de verde ambientalista tiene, no debe uno sorprenderse de los esfuerzos que han hecho para garantizar el apoyo de la cabeza del ubérrimo para garantizar los objetivos de ganar unas elecciones sin importar las maneras y con quien se puedan pactar arreglos con el solo objetivo de conseguir resultados exitosos a sus propios intereses a cualquier costo. Recordando las acciones del régimen nefasto y oscuro, pues no resulta nada extraño finalmente fue a lo que nos pretendió acostumbrar implantando sus propios códigos de moral y ética. El uribeño ordenó a su agrupación garantizar que se consolidará el apoyo, algunos salieron a decir que quien no estuviera de acuerdo al interior de la U con la “orden” deben abandonar el partido. Será el abrazo del oso?. Es de esperar que los bogotanos que han demostrado cierta madurez política a la hora de elegir el Alcalde Mayor demuestren que han aprendido y no quieren que se repita la nefasta historia en lo social, lo económico, la corrupción generalizada en lo nacional y distrital de estos “ilustres personajes” no se dejen llevar por los placebos uriverdistas y permitan que la ciudad recupere un rumbo positivo salga del hueco en que nos tienen las últimas administraciones en lo nacional y distrital y no sucumban ante cantos de sirena de las alianzas donde lo único que vale es el todo vale.  Se debe analizar qué hay detrás de todo esto…. No dizque son la agrupación electorera “más grande” cuál es el miedo a tener candidato propio. Quien es el propietario de la bandera del arco iris porque iniciaron rojos, luego fueron algunos amarillos, otros verdes y terminan todos naranjas. Que falta de seriedad y coherencia política tan abrumadora… un verde que maduró biche, el girasol que como la flor se mueve en la dirección en que vaya el sol, la disputa por cuidar los huevitos… en fin. Como decía mi abuelo no hay que parecerlo hay que serlo y lo que se dice debe ser causa de lo que se piensa y derivar en lo que se hace, claro esto es demasiado difícil para estos personajes.  Los bogotanos no olvidamos que en las alcaldías de los ahora verdes acabaron con los corredores ambientales para tapar los pisos verdes con cemento, cómo se cedió la operación comercial del acueducto a empresas particulares, entre ellas a los Nule, cómo el metro cúbico de agua se volvió el más caro del país después del sonado cantarrana y sus sobrecostos. Cómo se entregó el transporte, mediante Transmilenio, a grandes empresarios, configurando el negocio más leonino de la historia de la contratación pública, sólo nos devuelven el 4% de sus cuantiosas utilidades, se entregaron parqueaderos de estrato 6 garantizando a costas del erario su utilidad, etc, etc. La transparencia tampoco es su constante, ejemplos: los sobre costos cantarrana sobre el río Tunjuelito; los bolardos y las “peña-lozas” en la Caracas; el detrimento patrimonial al distrito por 23 mil millones en la concesión del "chance" en 2007; el sobre-avalúo de lotes para los macro-colegios; los millonarios contratos de aseo pagados por años sin cumplir el reciclaje ni el cobro por peso como lo ordena la Ley de servicios públicos; la creciente pestilencia contra la comunidad vecina del relleno doña Juana; la licitación de las obras de la 26 para los Nule. La tercerización y disminución de la calidad del empleo de trabajadores distritales y de hospitales públicos; bogotanos desplazándose a pie; generaciones de estudiantes de la universidad nacional pagando altas matrículas o soportando exclusión desde Mockus. Los corbatines y los moños navideños, así como los famosos bolardos de millón de pesos y la historia de “papi” con el INCORA en 1969.