Hay quejas recurrentes en muchos sectores sobre la escasa participación en las consultas realizadas el pasado domingo, incluso el Ministro del interior llamó la atención sobre los costos de la jornada electoral, y consideró la jornada como un “fracaso”. Vale decir que antes de estas declaraciones apresuradas se debe analizar cuáles son los factores que pudieron incidir en ese supuesto. No se puede salir a decir alegremente que estas consultas son “un desgaste de orden social, político y económico”, es claro que el objetivo de las consultas internas es propiciar la democratización de los partidos al permitir que los ciudadanos escojan a sus candidatos, que de lo contrario son escogidos por el “bolígrafo” o sea a dedo por “los dueños” de cada partido. Será eso lo que preocupa al Ministro que escogió bajo este mecanismo a su candidato a la Alcaldía y escogerán de la misma manera a los candidatos a ediles. Es cierto que la participación no alcanzó el diez por ciento del censo electoral. Pero nada de lo que se invierta en democratización de las costumbres políticas se puede considerar como un fracaso. No es siquiera comparable con lo que se pierde en corrupción y en la desidia de la administración pública. Se debe respetar al más de millón trescientos mil colombianos que asistieron a las urnas, que no sea mayor la participación es lo que debería concitarnos al análisis, debemos preguntarnos adonde estuvo la propaganda del mismo estado a que la gente participara, porque los partidos no fueron más eficaces en la promoción publicitaria del mecanismo. Que pasa con la formación política y cultural de nuestros conciudadanos porque su ausencia en las urnas tampoco se puede aceptar en las elecciones normales cuando la abstención promedia entre el 50 y 60 por ciento, acaso no existen serias deficiencias en el modelo de educación que hace que la gente no considere lo importante de ejercer sus derechos. Otro elemento que afectó fue el factor climático con su pertinaz lluvia durante la jornada. Otra situación puede encontrarse en la fecha de realización de la misma que se encuentra alejada de la inscripción de candidaturas y el arranque propiamente dicho de las campañas electorales. Lo claro es que ni el gobierno ni los partidos hicieron esfuerzo alguno en la promoción del evento. Y es cierto que se debe obligar a los partidos políticos para que establezcan mecanismos internos y democráticos que les permitan elegir a sus propios candidatos y ponerse serios por fin en el censo y carnetización de sus simpatizantes y militantes. Además, la institucionalidad del partido no le apostó a la consulta puesto que los que ya son ediles tenían el aval del partido por derecho propio. Entonces a los ediles actuales y a sus concejales no les convenía impulsar la consulta y eso se reflejó en que los votantes de 'opinión' llegaron a las urnas y no sabían por quién votar y hubo bastante voto en blanco. Esta baja votación lo que demuestra es que los partidos no adelantaron una pedagogía entre sus militantes sobre la importancia de participar en estas consultas, lo cual termina beneficiando a los que tienen las maquinarias dentro del partido. Además cuando se hagan las consultas deben participar todos los aspirantes con credencial o sin ella y luchar por el puesto definitivo en la lista y que el orden en que queden obligue a que las listas sean cerradas sin voto preferente. Eso garantizaría que se movieran todas las estructuras y maquinarias. Y de todas formas un saludo y felicitación a todas y todos los que salieron a depositar su voto y por supuesto a los elegidos a las listas y a todos los que participaron como precandidatos que mostraron su irrestricto compromiso con la democracia y su organización partidista. Twitter: @jairoamezquita |
2 de junio de 2011
Resultados de la Consulta
Suscribirse a:
Entradas (Atom)