27 de febrero de 2010

Todavía falta


Debo reconocer que me equivoque mis presentimientos en la presunta debilidad de la Corte Constitucional frente al régimen no existió, para el bien de los colombianos brilló la luz del Estado de Derecho. Se recibe con respeto su fallo porque a pesar de los abusos del régimen y sus pútridas mayorías en el Congreso que le han hecho una serie de malformaciones a nuestra Carta Magna del 91, su espíritu democrático y de equilibrio institucional fue sacado a flote por la Corte.

Sin embargo, no es momento de lanzar voladores al viento y embriagarse de triunfos baladís porque lo más importante no es derrotar personas, lo fundamental es unirse para acabar con el nefasto régimen que ha conducido a la adolorida patria a la crisis social y económica creciente y secular en que nos mantenemos aparte de los increíbles casos de corrupción, irrespeto a los derechos humanos y aprovechamiento del poder para satisfacer los egos de un régimen insaciable. En este viernes 26 de Febrero la noticia no sólo fue la del fallo de la Corte sobre el referendo, otra noticia de similar importancia o incluso mayor es el que el mismo régimen reconozca su incapacidad manifiesta y a través del DANE reconozca que llegamos a la crítica cifra del 14,6% de desempleo…. eso si es preocupante, porque si el organismo de la estadística nacional reconoce esa cifra en su análisis mensual, cual podrá ser la de verdad… cuando todos sabemos que si los encuestadores del DANE encuentran un joven en un semáforo haciendo malabares por unas escasas monedas es una persona que no está en la población desempleado…

Si no es momento de enarbolar las banderas de la esperanza… todavía falto mucho camino por recorrer, si los colombianos mantienen el régimen votando por sus cómplices y esbirros al Congreso de la República y por una de las imitaciones “eco” de Uribe la situación no es que vaya a mejorar mucho para las grandes mayorías empobrecidas y desempleadas de este país…

26 de febrero de 2010

El verdadero debate por el congreso



A quince días de las elecciones para elegir un nuevo Congreso de la República es preocupante que en lugar del debate de las ideas, de los programas y del modelo de país estemos inmersos en el debate de los maletines desbordantes de billetes que no pueden tener orígenes diferentes a la desbordante corrupción pública y a oscuros nexos con quien sabe qué tipo de organizaciones delincuenciales. Es triste que haya dirigentes políticos, incluso con credencial de cuerpos colegiados, que por unos billetes vendan su conciencia y la de sus electores en un sucio mercado que de consolidarse el 14 de marzo no conducirá por camino diferente a tener un Nuevo Congreso igual ó incluso peor que el que afortunadamente termina su período legislativo. Unas mayorías avasallantes de la U y conservadores y otros partiditos proclives al nefasto régimen y un futuro legislativo sordo, ciego, mudo y desentendido de la dramática realidad social y económica que atravesamos. El verdadero debate no estará en la política económica del gobierno nacional, en los errores intencionales y dirigidos por el régimen para favorecer solamente los intereses del gran capital, el enorme gasto público, los billones en exenciones tributarias (adivinen a quien), los billones en gasto militar y en familias en acción, sólo subsidios sin saldo de productividad y generación de riqueza, la bonanza desperdiciada, la política comercial sin nuevos horizontes, el país exporta muy pocos productos a muy pocos destinos. La precarización del escaso empleo, sólo ha aumentando la proporción de contratos en la proporción del total de empleados. La injusticia que representa el precio de la gasolina, se vincula al costo de oportunidad y no al costo de producción, lo que hace al consumidor colombiano un ciudadano de país importador y no de país productor, buscando sólo recaudar más para tratar de satisfacer el desaforado gasto público. La escasa o nula inversión en desarrollo tecnológico. En fin son tantos temas que no alcanzan estas líneas para mencionar los yerros del ególatra régimen mesiánico. Y eso sin meternos en temas de corrupción, exclusión y ataque a los derechos humanos.

No perdemos la esperanza (y espero que no me sigan llamando el romántico soñador de los 60’s) que los colombianos a la hora de depositar el sagrado voto, lo hagan en conciencia por aquellas personas que han tratado de defender los intereses de las mayorías del pueblo colombiano en el Congreso pero que se encuentran en absoluta minoría que no encuentra ni siquiera eco para censurar políticamente a los representantes y ministros del régimen por sus faltas a la moral y al erario. Es pues responsabilidad de las mismas mayorías que no se benefician de la acción de la política pública si siguen eligiendo a sus verdugos. Como dice nuestro amigo Pablo Enrique Salamanca “la falta de cultura política incapacita al pueblo para memorizar quienes de los que eligieron los traicionan”.

Los invito este jueves 04 de marzo a partir de las 7:00 PM en el Salón Comunal del barrio CENTRO A (Cll 16 J 99-59) para compartir nuestra visión de país en conjunto con el representante Salamanca, por una Colombia sin corrupción, una sociedad incluyente, tolerante y con productividad y empleo.


19 de febrero de 2010

El talante del régimen

Para expresar nuestra opinión esta semana vale traer a colación la frase del dramaturgo español Jacinto Benavente: “Los pueblos débiles y flojos, sin voluntad y sin conciencia, son los que se complacen en ser mal gobernados”. Lo único que podría uno decir para no afirmar que esto se cumple totalmente en nuestra patria, son las serias y graves deficiencias que existen en la gran mayoría de los colombianos en su formación cultural y socio económica, porque infortunadamente la calidad del modelo educativo no permite que se tenga una concepción crítica y se analicen las causas de los problemas y no sus efectos, cuando eso suceda seguramente regímenes nauseabundos como el vigente no repetirán.

Un régimen que además de corrupto muestra su talante de bajeza y torpeza en acciones mediáticas como la de Uribito Carimagua y la propaganda televisiva que pretendía poner en el mismo nivel de delincuentes a Robledo, Petro y Piedad Córdoba con los genocidas narcotraficantes de las FARC, que acto tan vil que muestra su desespero por su estrepitosa caída en su imagen e intención de voto, además de incapacidad de vender sus propios argumentos. Lo que debería hacer este oscuro personaje es salir a explicarle a la opinión lo que todavía no ha hecho, que pasó con los dineritos desaparecidos en Agro Ingreso robo Seguro, o como es que “ahora sí” va a haber tierrita para los campesinos cuando en su larga gestión como ministro “eco” no pudo hacer lo único que su gestión dejo fue mayor desempleo en el campo y concentración de la propiedad y el usufructúo de las tierras productivas. Que tal que a ellos le jugarán con la misma moneda de acciones torpes y desesperadas como sacar propaganda con las cabezas del régimen rodeados de motosierras y calaveras humanos compartiendo con los jefes del narcoparamilitarismo, claro eso no va a suceder porque la oposición si es decente. Además si observamos un poco más hacia el fondo de la problemática con respecto a las terroristas FARC y la permanencia del nefasto régimen se encontraría una especie de simbiosis perversa en la que la existencia del eterno conflicto los beneficia mutuamente, una costosa guerra que aparte de la tragedia humana que genera en términos de desplazamiento y vidas de gente inocente le permite al régimen mantener a los colombianos adormecidos sobre que “ahora sí” se le va a acabar y a la narco guerrilla seguir con su productivo negocio de tráfico de estupefacientes. Como hemos afirmado en varias oportunidades ese conflicto se acaba el día que se mate la culebra por la cabeza es decir atacando sus causas objetivas el narcotráfico y la excesiva desigualdad socioeconómica traducida en la tenencia de tierras y la falta de oportunidades.

Y los niñitos del papi haciéndole campaña a su amigotes en de la U y Conservadores sin aprovecharse de sus escasos vínculos con el poder público y las redes que han construido gracias a su denodada vocación de trabajo. NO MAS... U  Unanimismo perverso, Estados de opinión y Unitarios, Usurpación generalizada, Universalización de la corrupción, Ultraje nacional, Ungidos inmerecidos, Urracas parlanchinas, Utrajantes chuzadas, falsos positivos a Ultranza, Ubérrimos crecientes, Usufructuarios Únicos y predestinados de la riqueza nacional…. No más Urdidera de política injusta y excluyente. El 14 de Marzo votemos coherentemente con nuestros principios y por darle la oportunidad a nuestra sufrida patria de un mejor futuro, una Colombia sin corrupción, incluyente, tolerante y con empleo, yo lo haré por el partido Liberal.

12 de febrero de 2010

Periodismo y Estado de Opinión

Se celebró esta semana el día del periodista, fecha que se debería aprovechar para exaltar esa noble profesión, esa vocación de servicio por informar a la sociedad independiente de propias posiciones, de intereses particulares, de presiones gremiales y empresariales. Infortunadamente en países como el nuestro las personas que se dedican a esta profesión y hacen su trabajo como es debido tienen un campo de acción complicado su conciencia es objeto de compra por representantes del régimen con dádivas o con el sucio metálico, como recién pasó esta semana con una honesta candidata a repetir senado del partido Conservador quien descaradamente trató de comprar dos periodistas dejándoles sobres con dinero quien sabe de qué procedencia. Cuando no se dejan comprar ven amenazados su trabajo, su integridad e incluso su propia existencia si no “informan” lo que el estamento desea por lineamientos emanados del ilustre personaje primo de Pablo Escobar, el poder detrás del trono, que promueve y defiende el “estado de opinión” como etapa superior del estado de derecho.

Se les llena la boca a estos personajillos criticando a Chávez por el abusivo cierre de medios de comunicación de la oposición en Venezuela, (situación de por si detestable y violatoria a la libertad de prensa) pero no hablan de las trapisondas como el lobby del personaje de marras y el U Ungido familiar de la misma casa con los accionistas mayoritarios del grupo editorial del cual hacía parte la revista CAMBIO que condujeron a cerrar ese medio de comunicación que se había destacado por denunciar las buenas obras del régimen. Dizque la razón fue financiera… argumentaron que la revista en los últimos tiempos arrojaba pérdidas, pero lo que no cuentan es que el canal bogotano de propiedad de ese mismo grupo jamás ha arrojado utilidades desde que entró en funcionamiento, y que seguramente será el tercer canal nacional privado antes del 7 de agosto. Se pregunta uno cual es la diferencia con los abusos del régimen del país vecino. Nunca se olvidará que fue CAMBIO el primer medio en divulgar los beneficios de Agro Ingreso robo Seguro y las magnánimas decisiones de tierras para los campesinos de Uribito Carimagua, denuncias como las famosas chuzadas desde el DAS, los falsos positivos, los nexos con la clase política (Rojas Birry, el gobernador de Magdalena y los que hacen falta) de David Murcia Guzmán; las buenas relaciones con la mafia del hermano Fiscal del honesto ministro Valencia Cossio; los pobres negocitos sin usar el poder de los desprotegidos niños del presidente; las perlas de las inconsultas Bases Militares Norteamericanas y varios casos más. Acaso no es una forma de terrorismo aprovechar el poder para quitarse las supuestas molestias de encima, actuaciones subrepticias que destruyen el espíritu y de los colombianos así como su derecho básico a estar debidamente informados. Desde aquí, gracias al equipo periodístico que trabajaba en la silenciada revista por aportar lo suyo para que los colombianos nos demos cuenta en qué clase de manos estamos.

Y eso para no recordar los atropellos y la persecución que han sufrido otros periodistas como Hoffman Morris, Daniel Coronell, Alfredo Molano y otros que por el simple hecho de hacer su trabajo se les ponen palos en la rueda de diversas formas para presionar que no denuncien a la opinión pública las buenas acciones del régimen. Si es lamentable el panorama para los periodistas que no se sumen al populismo mediático tan en boga por estos días con la desprotección social y la reelección.

Si los colombianos elegimos de nuevo al régimen en primera o segunda persona y a sus cómplices congresistas continuará el drama humanitario más grave del hemisferio sur, millones de desplazados; falsos positivos, “cacería” del DAS contra la oposición, periodistas, magistrados y defensores de derechos humanos. Quienes osan divergir de las verdades absolutas del “Estado de Opinión” como la supuesta seguridad y bienestar general son inmediatamente señalados por el nefasto régimen como enemigos públicos, parias y agentes del terrorismo de “izquierda”. Pero se pregunta uno donde está de verdad el terror. Pareciera ser que lo que busca el régimen con su “Estado de Opinión” es menos medios de comunicación objetivos, lo que derivaría en menos democracia con el silencio cómplice de algunos colombianos.


5 de febrero de 2010

Creer ó no creer en las encuestas

Las encuestas son un instrumento que permite medir la opinión de una comunidad acerca de un asunto a través de pequeñas muestras, que deben ser representativas del total del conjunto a que pertenecen. En la actualidad se requiere un rápido y preciso flujo de información sobre las preferencias y comportamiento de sus miembros. En materia electoral una muestra de ciudadanos es interrogada para determinar cómo los candidatos y los asuntos son percibidos por la sociedad. Existen varias formas de realizarlas de acuerdo a lo que se quiere medir y son un mecanismo aproximado a una realidad cuando se desarrollan bajo parámetros científicos y con rigurosidad estadística con un nivel porcentual de error. La calidad de una encuesta es determinada en gran medida por su propósito y por la forma en que es conducida y son un instrumento valioso cuando son utilizadas para la toma de decisiones en lo económico, lo social y lo político. Pero en una sociedad como la nuestra, con un gobierno que ha centralizado el poder en todos los ámbitos y que los grandes grupos económicos se han beneficiado de la obra de gobierno puede distorsionarse este instrumento más allá del margen de error. Pueden ser inducidos sus resultados de acuerdo a como se tomen las muestras de población ó como pasó recientemente con un medio masivo de comunicación abyecto y con familiares en posiciones neurálgicas del régimen además con candidato presidencial, que tienden a perder la objetividad y a interpretar amañadamente los resultados. 

Si es preocupante porque en un régimen cuasi absolutista como el que padecemos los sondeos de opinión no cumplen con su función primordial como es la de medir la opinión sino busca convertirse es en formador de opinión, no de otra forma se puede interpretar la forma como el medio masivo de comunicación manipuló los resultados de la encuestas hecha por DATEXCO sobre la opinión al referendo. Aseguró “Si hay referendo, la mayoría votaría a favor del Presidente”, "El 85 % de los ciudadanos votaría para que Uribe fuera candidato", fue titular en el impreso y en el online el pasado sábado. Pero al observar en detalle las cifras es evidente que la encuesta no es tan favorable para el régimen como asegura el diario. 85 por ciento de personas que sufragarían para que Uribe fuera candidato, pero no explican que esta cifra no viene del total de encuestados, sino del 47,5 por ciento de los 1.200 encuestados, que son quienes saldrían a votar. Afirman que 1020 de los 1200 encuestados quieren que Uribe sea candidato, cuando la encuesta lo que realmente dice es que 480 personas de 1.200 votaría a favor de la reelección. A esto último le debemos sumar la encuesta telefónica a 1004 personas, realizada por CM& y el Centro Nacional de Consultoría el pasado jueves en la cual los encuestados respondieron ante la pregunta si se era partidario ó no de la reelección un 54% respondió que no. 

En mi opinión por fin se empieza a perfilar una tendencia creciente de anti reeleccionismo, lo que de aprobarse la viabilidad del referendo generaría que no tenga el respaldo suficiente en las urnas. Claro, esto no nos puede llamar a optimismos desbordados sobre un mejor futuro para Colombia porque las mismas encuestas ubican liderando a los que serían los herederos del nefasto régimen para ganar la justa presidencial, y si en las elecciones de Congreso las mayorías cómplices de la U, PIN, Conservador y los demás movimientos uribistas y seudouribistas se mantienen lo único que se obtendría es un cambio de rostros y de nombres, pero no de los niveles de corrupción ni de política pública a favor de las mayorías sometidas a niveles de injusticia social y económica como jamás en la historia desde la época de la colonia. 

Con "El Tiempo" los colombianos nos hemos ido dando cuenta que el exceso de uribismo... es perjudicial para la salud... de la adolorida e injusta patria.